Llegaba a Madrid otra noche de Champions donde no cabía otra posibilidad para los de Zidane que ganar al Legia, la cenicienta del grupo. Los visitantes llegaban al partido sin haber puntuado aún, mientras que los blancos, que siguen sin poder contar con Modric, Casemiro ni Sergio Ramos, buscaban los tres puntos, tras el empate en Dortmund.
El partido empezaba mostrando ya la clara superioridad local, aunque el equipo polaco se acercaba a la portería de Keylor con peligro gracias a la pasividad y desorden en la defensa blanca, pero no lo supieron aprovechar gracias al palo izquierdo de la portería local, que repelió un disparo de Odjidja-Ofoe. En el minuto 16, con una internada por la banda derecha, se abrió hueco entre la defensa rival y definió ajustándola a la base del palo izquierdo y puso el 1-0.
A los cuatro minutos, un centro-chut de Marcelo que rebotaba en Jodlowiec se coló en la portería de Malarz y ponía el 2-0 y parecía que dejaba ya el partido encarrilado para el Madrid, aunque aún no sería así, ya que en la siguiente jugada Danilo cometía un claro penalti, que convirtió Miroslav Radovic engañando a Keylor y metiendo al Legia otra vez en el partido.
A falta de ocho minutos para el descanso del partido, una buena jugada del Real Madrid, en la que Danilo recibe el balón en fuera de juego, se la da Cristiano y este le deja el balón con un taconazo a Asensio, que define por el lado derecho, pillando a contrapie al meta polaco, que se venció al lado izquierdo. Marco Asensio, con este gol, conseguía marcar en el debut de las tres competiciones que ha jugado con el Real Madrid: Supercopa de Europa, Liga y Champions.
El equipo de Varsovia llegaba con más facilidad al área local de la que se presuponía antes del partido, el Madrid atacaba bien pero no era capaz de conseguir una defensa sólida. Ya pasado el minuto sesenta, Zidane dio entrada a Lucas Vázquez y Morata, que no le podrían haber dado mejor resultado ya que, cuando llevaban cuatro minutos sobre el terreno de juego, Morata hizo una muy buena jugada por banda izquierda y puso el balón a Lucas en el corazón del área, que definió, de primeras y sin dejar caer el balón, entre las piernas de arquero.
Ya a falta de seis minutos para el final del partido, Morata recibió en la zona izquierda del área un balón de Cristiano y definió con un disparo al primer palo, poniendo el 5-1 que ya sería definitivo, aunque el Madrid quería más y buscaba el sexto. Tuvo varias ocasiones Cristiano Ronaldo, que acabó desquiciado por no marcar gol, y una Benzema, que mandó por encima del larguero.
Acabó el partido en el Bernabéu con seis goles, cinco para los locales, que ganaron gracias a su aplastante superioridad en ataque, pero mostrando gran fragilidad defensiva, mucho que mejorar para los de Zidane de cara a los partidos grandes.
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